miércoles, 26 de septiembre de 2012

Fallece el montañero Juan Tomás Martínez al incendiarse su vivienda en Caín

Diario de León.      larry | caín 27/09/2012  

Los hermanos Martínez y la esposa de Juan Tomás, Asunción.
Los hermanos Martínez y
la esposa de Juan Tomás, Asunción. dl
El último escalador del Picu Urriellu

Juan Tomás Martínez nació en Camarmeña (Asturias) en 1919, pero se casó y pasó a vivir en Caín en 1950, seis años después de abrir con su hermano Alfonso la vía de escalada más utilizada para subir al Picu Urriellu. Se trata de la Sur Directa de los Hermanos Martínez y, a decir de los escaladores, la más lógica y progresiva. Llevaba subiendo al Picu desde los 14 años, no en vano era hijo del mítico Víctor Martínez, el de Camarmeña, tercero en la secuencia de ascensión al tótem del Macizo Central de los Picos de Europa y toda una leyenda como guía del Urriellu.
En 1945 Juan Tomás pasó a formar parte de la guardería del Coto Nacional de Caza de los Picos de Europa, continuando la saga de guardas que inició su padre y que actualmente continúa con su hijo Julio, también guarda del Parque Nacional.
Juan Tomás tenía diez hijos y un buen puñado de nietos y también era especialmente querido por el colectivo montañero por su trato afable y locuaz, así como su incansable capacidad para contar una y cien veces los lances más atrevidos de sus expediciones. Gozaba de relativa buena salud para su edad y una lucidez envidiable, disfrutando aún de las partidas de subastado con sus vecinos de Caín, de donde se resistía a marchar pese a la insistencia de sus hijos para que pudiera estar más atendido y con más comodidades. Caín era donde estaba más a gusto, en su humilde casa, rodeado de la verticalidad con la que tantas veces había jugado y a la que siempre había ganado.
Con Juan Tomás Martínez desaparece el último representante de la segunda generación de escaladores que se desenvolvieron en torno al Picu Urriellu (no le gustaba que la gente lo llamase Naranjo), contribuyendo a construir el mito del alpinismo español del que ahora ya forma parte en sentido histórico, pero también desaparece un amable vecino de Caín con el que simplemente echar una parrafada.
En Urriellu, en Picos y en Caín, definitivamente ahora falta alguien.



El Urriellu se queda huérfano
Juan Tomás, con boina,
y su hermano Alfonso,
en el Tiro Tirso. :: E. C.
EL COMERCIO.ES 27 SEPTIEMBRE 2012
El Urriellu se queda huérfano


El Urriellu se queda huérfano
Alfonso Martínez, Pío Canga y Juan Tomás, los primeros españoles, junto con José Ramón Lueje, quien hizo la fotografía, que coronaron el Urriellu tras la Guerra Civil, en 1942. :: J. R. LUEJE

El final de una saga y de una forma de entender la montaña. El histórico guía cabraliego Juan Tomás Martínez fallecía ayer a los 92 años víctima de un incendio en su casa, en Caín (León), donde residía desde hacía más de sesenta años. Su muerte se lleva al único superviviente de una generación, la segunda en la historia del Urriellu, de la cual también formó parte su hermano, Alfonso (fallecido en 1992). Ambos escribieron parte de la historia del Urriellu al abrir, el 13 de agosto de 1944, la vía Sur o 'Directa de los Martínez'. Antes, su padre, Víctor, se había convertido en la cuarta persona que coronaba este pico cabraliego. Para dar fe de su hazaña, Víctor regresó con parte de la cuerda que Pedro Pidal y Gregorio Pérez, 'El Cainejo', habían usado en la que fue la primera ascensión a la cumbre del Urriellu, en 1904. El tercero que lo había logrado fue el doctor en geología y alpinista alemán Gustav Schulze (1906).
Ayer, a los 92 años, un accidente -quedó atrapado por las llamas, que pudieron haberse originado en la chimenea, mientras dormía- se llevó a Juan Tomás Martínez. Y la montaña se quedó muda. Su esposa, Ascensión, pudo escapar y aunque varios vecinos acudieron al instante en su ayuda e inmediatamente llegó una brigada del Parque Nacional de los Picos de Europa, además de un hijo del matrimonio, nada se pudo hacer. La estructura de la vivienda, muy antigua, favoreció que las llamas se propagaran rápidamente y no aguantó. Se da la terrible causalidad de que el matrimonio tenía previsto irse de su domicilio este domingo para trasladarse hasta Cangas de Onís donde reside uno de los diez hijos que tuvo.
Nacido en 1919 en la localidad cabraliega de Camarmeña, Juan Tomás deja tras de sí la historia de los inicios del Urriellu en su camino a ser uno de los picos más emblemáticos del planeta. La vía que abrió con su hermano es la más usada por quienes buscan hacer cumbre en esta montaña. Es una ruta sencilla y segura. Justo lo que buscaban los dos hermanos. Hasta entonces se utilizaba precisamente la Vía Víctor, abierta por su padre en 1924. Este itinerario presentaba una travesía expuesta. Los hermanos Martínez, junto con unos clientes, encontraron un camino prácticamente carente de riesgos.
«Parte de la historia de Cabrales»
«Era una persona extraordinaria y Cabrales le está muy agradecido, es un personaje de la historia del concejo. Junto con su hermano, era alguien fuera de lo normal. Se les tiene que tener en cuenta en la historia de Cabrales», decía ayer el alcalde del municipio que le vio nacer, José Antonio Pérez Prieto.
De momento, el Consistorio envió una corona de flores en señal de condolencia. Y no se descarta organizar algún tipo de reconocimiento. Ya en 2001, Juan Tomás encabezaba un homenaje colectivo que rindió la Federación de Deportes de Montaña, Escalada y Senderismo del Principado a los pioneros de la montaña asturiana. Después, en 2004, en los actos del centenario de la primera cumbre en el Urriellu, Juan Tomás era el encargado de realizar la ofrenda de una cuerda -«símbolo de la ayuda que todos necesitamos para subir la escalada de la vida»- en el mirador del Pozo de la Oración a Nuestra Señora de las Nieves.
Ese mismo año, el Ayuntamiento de Cabrales rendía un sencillo homenaje al que fuera su compañero inseparable en las montañas de los Picos de Europa, su hermano Alfonso, el más conocido de los guías del Urriellu y que hizo más de 200 ascensiones, junto al monolito que en el cabraliego Pozo de la Oración guarda la memoria de Pedro Pidal y 'El Cainejo'.
Juan Tomás, que también fue guarda forestal, coronaba el mítico pico por primera vez con 14 años y desde entonces acumuló medio centenar más de ascensiones, la mayoría acompañando a clientes que precisaban de sus servicios como guía, como con la tercera mujer en alcanzar la cumbre (Carmen Sánchez de Casal).
De hecho, la Vía Directa de los Martínez surgió de la necesidad de garantizar la seguridad de quienes querían llegar a los 2.519 metros de su cima, teniendo en cuenta además que el material de aquella época nada tenía que ver con los modernos sistemas de hoy. La aguja a 2.422 metros de altitud que lleva el apellido de estos dos hermanos también da fe de sus hazañas.
El funeral por el eterno descanso de Juan Tomás se oficiará esta tarde, en la iglesia de la localidad leonesa de Caín, en cuyo cementerio será enterrado.
La Nueva España 27/9/12

Ha muerto Juan Tomás

El adiós a un gran amigo y a un inmejorable maestro.
 
FRANCISCO BALLESTEROS VILLAR
La familia montañera está de luto. Conmovido todavía por la fatal noticia de la muerte de Juan Tomás Martínez a causa del incendio que arrasó su casa, escribo estas líneas en su recuerdo. Dios ha querido que el gran guía de montaña, aguerrido escalador que puso su vida en peligro en multitud de ocasiones para salvar a muchos montañeros que se encontraban en dificultades, sin importarle los riesgos que afrontaba, haya acabado trágicamente sus días en un siniestro doméstico, dejándonos hundidos en el dolor por la pérdida de un gran amigo y de un inmejorable maestro, cuyo ejemplo quedará indeleble entre nosotros.

Juan Tomás Martínez Pérez fue el sexto de los once hijos que tuvo el legendario bulniego Víctor Martínez Campillo, cuarto conquistador del Naranjo de Bulnes, el que bajó el trozo de cuerda que Pedro Pidal y Gregorio Pérez dejaron en la chimenea de su cara norte y el que instaló en su cumbre un asta de fresno de cinco metros y una bandera de España por encargo de Aurelio de Llano. Nació Juan Tomás en Bulnes el 28 de diciembre de 1919 y se incorporó a la guardería del entonces llamado Coto Nacional en 1945. En 1950 se casó con Asunción Pérez Gao y trasladó su residencia a Caín, de donde no se movió más. Ejerció el pastoreo por Trea, Oliseda y Mesones, sin llegar a establecer majada estable.

Su figura llamaba la atención. Era delgado como todos sus hermanos, pero estaba dotado de una complexión atlética, con gran fuerza, agilidad y bravura, dotes que exhibía en sus escaladas y que hicieron que su hermano mayor, Alfonso, le escogiera como acompañante en la mayoría de sus actividades montañeras, precisamente en aquellas con mayores riesgos. Nada se le ponía por delante, lo que hizo que en más de una ocasión fuera reprendido por su citado hermano, siempre preocupado por la seguridad. Recordemos que su admirable decisión para introducirse por las paredes rocosas y su facilidad para superar los pasos difíciles en libre, sin cuerdas ni clavijas, llevó al famoso escalador gijonés El Boti, compañero en muchas aventuras, a llamarle cariñosa y admirativamente «cabra loca». Nada de loco tenía, pues basta poner de relieve que jamás tuvo accidente alguno ni puso en aprietos a ninguno de los numerosos montañeros a los guió.

Subió por primera vez al Naranjo el 19 de septiembre de 1935, acompañando a Alfonso y a los peñalaros Carlos Martínez Páramo y Eugenio Quevedo Gerroicabeitia. No volvió a escalar hasta el término de la Guerra Civil. Durante ella, enterado de que Alfonso había escapado de la prisión de Celorio días antes de ser fusilado por su pertenencia a Falange Española, que se había incorporado al Ejército nacional y que se encontraba en Oseja de Sajambre, hacia allá se desplazó sin ser sorprendido; estas dos escapadas motivaron que se requisara todo el ganado familiar, que se detuviera y fusilara a su hermano Julio y que sus hermanas Florentina y Julia fueran llevadas a la Iglesiona de Gijón.

Finalizada la contienda, Alfonso y Juan Tomás, junto con varios escaladores cántabros, abrieron la vía directa de la cara sur del Urriellu, la vía de los Hermanos Martínez, que es la más popular y utilizada de cuantas existen en el Naranjo.

Tuvo desde entonces una vida activísima como guía de montaña, participando en las más renombradas escaladas al Pico, entre ellas la subida y entronización de la desaparecida imagen de la Virgen de las Nieves. No se sabe las veces que subió porque no quería firmar en el libro de registro que en la cima hubo durante muchos años. Siempre me dijo que le parecía la firma una vanidad de los que querían dejar constancia de su paso por la cumbre. Para él, la escalada al Pico era una actividad más a la que no daba la menor importancia.

Llegada la edad de la jubilación, abandonó también la actividad montañera, salvo alguna salida con sus amigos más íntimos. Pero continuó estando al servicio de todos, dándonos informaciones, y, lo que es mejor, el ejemplo de su hombría de bien y de su memorable vida.

Ocurrida la desgracia, quiero hacer llegar a su mujer, Asunción, y a sus diez hijos: Julia, Ana María, Alfonso, Piedad, Ascensión, Argentina, Concepción, Julio, Juan Tomás y María del Mar, así como a sus sobrinos, que le querían como a un padre, el testimonio de mis más sincero y conmovido pesar.

La Nueva España 26 septiembre 2012
     El montañero Juan Tomás, de 92 años, ha fallecido hoy en el incendio de su vivienda en la localidad de Caín (León), municipio situado en el Parque Nacional de Picos de Europa, un fuego que al parecer se originó por una mala combustión en la cocina. ...
La casa era de madera y de construcción antigua, según ha detallado a Efe el alcalde de Posada de Valdeón -término al que pertenece Caín-, Tomás Alonso, lo que propició que las llamas se propagaran rápidamente por toda la estructura.
Se supone que las llamas se iniciaron en la cocina, cuando la mujer del ahora fallecido, de 89 años, iba a preparar el desayuno.
Una vez que se propagó el fuego, la mujer salió a pedir auxilio y el hombre quedó atrapado dentro, según ha agregado el regidor.
La mujer no ha tenido que recibir asistencia y el incendio ha quedado extinguido con la intervención de un camión de bomberos del Ayuntamiento.
El alcalde ha señalado que una vez que comenzó el fuego las llamas alcanzaron el tejado en tan solo diez minutos.

ASTURIANO DEL MES EN 2004
Juan Tomás Martínez, de 92 años, montañero e histórico guía del Urriellu, había recibido en agosto de 2004 la distinción de «Asturiano del mes» de LA NUEVA ESPAÑA. Con este premio el periódico quiso vincular, el año en el que se cumplía el centenario de la primera ascensión al Naranjo, con la figura de una persona que era el último escalador vivo de la segunda generación de apasionados del Picu, a la que también perteneció su hermano Alfonso. Ambos habían abierto en 1944 la vía «Directa de los Martínez», una auténtica joya por su lógica y accesibilidad.

sábado, 22 de septiembre de 2012

La Guardia Civil confirma que el cadáver hallado en Amieva en mayo de 2011 era del ciudadano alemán desaparecido

 ASTURIAS
OVIEDO, 21 Sep.
La Guardia Civil ha conseguido identificar los restos óseos localizados en el Monte Moneru, próximo a la localidad de Argolibio-Amieva el día 8 de mayo del año pasado 2001 y ha confirmado que corresponden a un ciudadano alemán R.H.G., de 68 años, que había sido vecino de Stuttgart (Alemania), sobre el cual pesaba un señalamiento por desaparición.
Según ha recordado este viernes la Guardia Civil a través de un comunicado, el 8 de mayo del año pasado se recibió llamada en la Central Operativa de Servicios (COS) de la Guardia Civil de Gijón, comunicando que un vecino de la zona de Amieva había localizado unos restos óseos humanos, en el paraje conocido como el Monte Moneru.
El Equipo de Policía Judicial de Llanes junto con el forense se personó en el lugar para hacerse cargo del cuerpo y los efectos personales que se encontraban próximos a este, iniciando las labores de investigación para poder esclarecer la identidad de los restos encontrados y lo que había ocurrido.
La inspección ocular realizada por los agentes así como el informe forense hacía pensar que el cuerpo hallado pudiera ser de un hombre, de raza blanca, de unos 1,72-1,77 centímetros de altura, de entre 54 y 64 años de edad, con artritis y una enfermedad crónica en las articulaciones sacro-iliacas.
Los agentes de la Guardia Civil recogieron varias piezas dentales del cuerpo que remitieron al Servicio de Criminalística, para la extracción del perfil genético y posterior cotejo con loas distintas bases y lograr así la identificación del cuerpo hallado.
Asimismo, en el lugar de la aparición del cuerpo, se encontraron unas gafas de una marca y modelo que no se comercializaban en España y cuyo periodo de venta al público fue muy limitado.
Los agentes a través de esta línea de investigación confirmaron el lugar de venta de esas gafas, siendo ubicado en la ciudad alemana de Stuttgart. Las gafas tenían la peculiaridad de que poseían una palabra grabada en la patilla, que resultó ser el nombre del establecimiento de venta.
Tras ponerse en contacto con el citado establecimiento sus propietarios confirmaron, sin lugar a dudas, que el grabado de la patilla procedía de su establecimiento.
La Guardia Civil solicitó la lista de clientes que habían adquirido ese peculiar modelo de gafas, para comprobar las identidades con la base de desaparecidos de la policía alemana, dándose el caso de que uno de los clientes que compro esas gafas se encontraba en la base de personas desaparecidas de Alemania.
 
En el transcurso de la investigación se pudo conocer que en agosto de 2007 en la localidad de Soto de Sajambre (León), la Guardia Civil de León localizó un vehículo abandonado cuyo propietario era una persona alemana, que respondía a las características morfológicas de los restos encontrados.
El dueño de este vehículo fue identificado por la Guardia Civil en la localidad de Posada de Valdeón (León) en julio del 2007, pudiéndose conocer que estaba siendo buscado en Alemania como persona desaparecida, tras denuncia de un familiar.
Tras serle puesto de manifiesto esta situación este individuo abandonó la localidad, no volviéndose a saber más de su paradero.
El Servicio de Criminalística de la Guardia Civil remitió un informe a la Comandancia de Gijón, que permitió determinar que el perfil genético obtenido de los restos óseos encontrados es coincidente con el correspondiente al ciudadano alemán.
A la vista de los resultados obtenidos la Guardia Civil ha dado por concluida la investigación, dando por identificado el cuerpo hallado y esclarecida la desaparición de esta persona, siendo la muerte de etiología suicida.